.




lunes, 18 de mayo de 2015

Día Libre

Hola.

Yo también estoy extrañado de estar aquí -escribiendo tan espontáneamente-, al parecer las cosas naturales son una más de esas cosas a las que no estoy acostumbrado... vaya novedad.

Esto es absolutamente random y obedece exclusivamente al hecho de que hoy ha sido un día exactamente así, sin tener cresta idea de lo que hago/pretendía o iba a hacer, entonces no se me ocurrió una mejor manera de terminarlo con otra acción aleatoria, como ponerme a escribir en el blog de la nada.


"Día Libre"

Me desperté por segundo día consecutivo a una hora indecente y por millonésimo en mi vida con ganas de hacer nada. Llevaba unos cuantos así, sufriendo por existir porque ya desde antes de abrir los ojos sabía lo que venía (ducha/té/celular/secador/ropa/mochila/micro/universidad/universidad/universidad/noche/micro/frío/casa/televisión/sueño/cama), sabía que ayer había sido igual y que mañana sería exactamente igual, probablemente el subsiguiente también y con mucha seguridad quedaban bastantes semanas de lo mismo, entonces lo medité durante esos 5 minutos que suelo tomarme antes de empezar a lidiar con mi vida y mis ganas -constantes- de no estarlo que casi siempre llegan a nada más que dos pensamientos y un nuevo estado de coma por una hora aprox, de la cual despierto solo por el pánico y me levanto antes de siquiera pensar en volver a pensar en lo aterior de nuevo... pero esta vez no fue así.

Ahora estaba en mi cama y había dormido tantas horas que no podía seguir evadiendo la auto-conversación del "en serio preferiría morirme antes de tener que hacer lo mismo otra vez", entonces se me ocurrió la idea de hacerme sentir culpable hablándole a mi grupo de compañeros que están en la misma situación, esperando palabras como "flojoql" o cualquier otro improperio motivacional, pero mi sorpresa -y felicidad interna- fue mayor cuando me di cuenta que todos estaban absolutamente en sintonía con mi depresión endógena de ese día.

Acto seguido, ¿qué hacer?, pensé y se me ocurrieron en medio segundo un millón de ideas, porque enfrentémoslo, cuando tu vida es miserable y tus horarios son marcianos dejas de hacer tantas cosas que tus momentos de pausa son solo para armar una lista invisible de cosas que jamás vas a hacer, pero bueno... como suele suceder también, me di cuenta que ahora que podía, en verdad me daba mucha lata hacer el esfuerzo de hacer cualquiera de ellas y prefería quedarme en mi casa haciéndome un burrito con mi cuerpo y las sábanas... por lo que decidí llegar a un término medio entre las dos cosas e ir a la universidad, pero solo a clases y no a estudiar (créanlo o no, en mi situación actual ir a "clases" es un gran panorama de distracción), así que aproveché de tomar mi cámara por si encontraba algún paisaje y salí. Mi sorpresa fue que mi compañeros tenían otros planes, así que después de solo una hora y media de clases y una siesta de 10 minutos en uno de los recreos tomé mis cosas y salí, me paré varias veces por un par de fotos y me encontré con el auto de la Rocío viniendo a buscarme porque se había cansado de esperar donde se supone tenía que llegar "rápido".

Después el día solo mejoró, fuimos al mall, conversamos de un montón de cosas y nos reímos de un montón de gente, maté mis ganas de tomar helado en un día en que no hiciera calor y fuimos a comer donde hace tiempo queríamos solo para seguir hablando de cosas que ya no me acuerdo, cantamos un poco en el auto, caminé a tomar micro hablando de sabores de té y me bajé antes de llegar a mi casa solo por el gusto de irme a pie, sintiendo frío y con algo de música de fondo.

Y ahora estoy aquí, un poco resfriado, un poco culpable y bastante más feliz que cualquier otro día en que no hice lo que hice hoy, supongo que existen demasiados días en el calendario como para siempre pasarlos haciendo lo que uno debería y sintiéndose miserable al respecto.

Me despido diciendo que han pasado exactamente 6 días desde que terminé de escribir el párrafo anterior y que aunque ya ni sé porque nunca lo publiqué, la razón por la que ahora lo hago es porque hoy de nuevo fue un día libre, en que tuve la intención de hacer lo que ya estoy acostumbrado hasta que simplemente ya no pude hacerlo más, y aunque ahora si me quedé en mi casa y solo salí a comprar bebida a un negocio a 5 metros de mi casa, también lo pasé increíble. Leí un montón de blogs, pasé horas en YouTube y vi dos películas en compañía del Ernesto -mi perro- que cada 10 minutos se encargaba de hacerme parar la reproducción. 

Les dejo como siempre una canción, que fue parte de la sección de "auto-recomendaciones" de mi entrada pasada, siento que desde que la puse en esa lista no puede parar de escucharla, es tan nada y a la vez tan todo, de esas canciones que no te suma ni resta por si sola, pero te hace mejor cualquier cosa que estés haciendo y te dan ganas de tenerla de fondo. Ojalá les guste y ojalá si sus rutinas a veces les quitan un poco las ganas de respirar como a mi, se den el auto-regalo de aunque sea por un día de vez en cuando hacer otra cosa.

Hasta cuando tenga que ser.



No hay comentarios:

Publicar un comentario